El domingo pasado los dominicanos fueron a ejercer su derecho al voto en medio de la pandemia actual. La abstención fue significativa, 45%, pero mas de la mitad(55%) no dudó en ir a votar. El resultado evidencia un voto de castigo destronando al pld en plazas de su acostumbrada popularidad. Este voto refleja un rechazo claro al PLD, pues no solo el candidato a la presidencia del PRM obtuvo el 52.55% en una primera vuelta sino que el PLD pierde su mayoría en el Senado, quedándose solo con 6 senadores.
En estas elecciones destaca el voto de los jóvenes de clase media y alta que llenaron las filas en el Distrito Nacional y otras provincias, estos jóvenes a los que despectivamente se les llamó «popis» marcaron diferencia contrario a lo que decía en un tweet Bolivar Valera, tweet que enervó y amplificó los ánimos de las protestas en la plaza de la bandera, confirmando que las transformaciones sociales y las revoluciones en la historia las llevan a cabo la clase media. Esta experiencia democrática pone de manifiesto la oportunidad de involucrar jóvenes que antes no estaban interesados en estos temas y que ahora estarían más que dispuestos para formarse en política, economía y continuar siendo parte esencial de las transformaciones que necesita la República Dominicana para un mejor desarrollo.
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